• MFM Records lanza su tercer VA apodado The Chosen Ones. Los elegidos por el sello plantean un lanzamiento coral que sigue la línea del sello y despunta en intensidad y estilos. El próximo 30 de septiembre a la venta.

• Get ready, Superman del Techno, estrenamos Kryptonite, el track del fundador del sello: C-System.

Sinceramente, no soy un gran fan de los superhéroes convencionales. Superman nunca me ha dicho gran cosa, y creo que jamás he llegado a tener una camiseta con su logo —ni cuando tenía 15 años, esa época en la que crees que comprar cosas de este tipo molan y tal—. De hecho, tal era mi empanada disléxica y lejanía con el asunto Superman que, al revisar algunos artículos para preparar esta première, pensaba que la Kryptonite era lo que necesitaba el tipo para hacerse fuerte, y no precisamente su talón de Aquiles, aquello que le convierte en un ser débil y que le deja sin poderes mágicos.

Entonces, ¿por qué un track tan potente y vigoroso como el de C-System se llama justamente como aquello que debilita a nuestro héroe de hoy?

La verdad es que, para preparar esta première, he intercambiado también algunas preguntas con C-System, pero no le pregunté por ello. Con él hablamos de su sello, MFM, pero no de Kryptonite. En realidad, la idea era leer sus respuestas y elaborar luego una teoría marca de la casa que juntase ambas cosas. Tras darle varias vueltas, por no decir muchas, he logrado elucubrar lo suficiente como para llegar a una posible entelequia, como siempre citando un artículo random en el que se muestra cómo Superman podría ser inmune a la Kryptonite (read here). Tendríamos que hablar de dimensiones paralelas (eso sí), es decir, hay ciertas dimensiones que visita Superman en las que la Kryptonite no le produce el mismo efecto nocivo. Pero eso nos lleva de nuevo a nuestra dimensión, la única que el común de los mortales conocemos (un poco).

Y, ahora disculpad que sea un tema recurrente en algunos artículos recientes, pero es inevitable. Es el tema del year, y hay que seguir dándole la vuelta. Porque, con la pandemia y su mala gestión y directo abandono de la escena por parte de políticos and so on, los que habitamos el mundo de la música electrónica hemos topado con nuestra Kryptonite. Parecíamos imparables (y sí, a pesar de ello ya nadábamos en la precariedad y un sector poco organizado), pero nos han ultrajado a base de bien, y la cosa no pinta nada favorable.

¿Entonces, cómo se está combatiendo esto a nivel anímico y moral desde las trincheras? Lo sabéis, we can feel it.

Los productores, aferrados a su estudio, fabrican temazos para permear esta truncada dimensión nuestra con el musicón que termina anulando los efectos bajoneros de la Kryptonita aka mundo pandémico que deja fuera de juego nuestra escena. La música es precisamente lo que nos mantiene en pie y firmes, moving forward. De hecho, lo explica C-System al preguntarle qué planes tiene para los próximos meses en relación a MFM Records: «Seguir el mismo camino, avanzar como se pueda, seguir ayudando a artistas nuevos, continuar aportando todo lo posible en la difícil situación en la que estamos y luchando sobre todo por la música, que al final es lo más importante». Esta es la batalla que MFM sigue librando con sus Elegidos (The Chosen Ones), calibrando con este potente lanzamiento una vía para llevar a nuestra mermada realidad la energía de ese mundo paralelo en el que seguimos con la misma fuerza y disfrutando la música juntos, tal y como la conocimos y aprendimos gozarla.

A través de las preguntas que intercambié con C-System hay algunas palabras clave que siguen definiendo cómo se arma un proyecto como MFM Records, a prueba de pandemia. El talento de los artistas que colaboran, los amigos del sello y cómo, entre unos y otros, acaban por formar lo que sería una family de afinidades y vocación musical, en palabras de C-System: «verdaderos amantes de la música». ¿Acaso, en un mundo que se derrumba, hay algo creativamente y artísticamente más bello que eso? Con The Chosen Ones V.3, track a track, entramos en esa realidad paralela que nos mantiene cerca de lo que nos hace vibrar y nos hace fuertes ante lo que echamos de menos, la escena y todos y todas los que forman parte de ella, para muchos una manera de vivir y, al mismo tiempo, una fuente de ingresos, inspiración y forma de lidiar con todo el resto.

Llegados a este punto en el que me he puesto bastante sensible, demos paso al track que ha bautizado esta reflexión y el motivo por el que nos hemos juntado en este artículo. Please, enjoy it as much as you can y sí, si eres capaz de imaginar cómo sonará este despliegue de emociones y graves en un club, prepárate para llegar a la pista volando y con capa cuando (finalmente) llegue el momento.

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