Ucronía electrónica en Rhod Records con KOTEC y Vlaeminck [Première!]
El 28 de abril de 2022 los productores KOTEC & Vlaeminck cuentan una historia electrónica diferente en Rhod Records. Unen mentes y estudios para presentar Ucronía Uno, un primer trabajo que nos abre la mente a la pregunta: ¿Dónde está la frontera entre lo experimental, el ruido y la música? ¿La hay en algún punto? ¿Y si fuese todo diferente, o al revés?
Estrenamos el track alt. 102 en exclusiva antes de su llegada.
Existe un fascinante género literario llamado ucronía o alternate history que se plantea desde una simple pero casi inevitable pregunta para la insaciable curiosidad humana: ¿Y si las cosas hubiesen sido de otro modo, cómo serían hoy? Y a partir de ahí, el vencedor pasa a ser vencido, el invasor a invadido, o etcétera, sencillamente se plantea una ficción con un vuelco histórico opuesto al que sucedió. Lo hemos visto en el cine, también, o en series: ¿os acordáis de esta?
Simple y llanamente, dos exploradores del sonido como son KOTEC y Vlaeminck, inconformistas a la hora de rendirse al bombo que todo el mundo adora y baila (yo el primero), siempre un peldaño más arriba a la hora de alcanzar territorios y experimentos ignotos, nos preguntan en Ucronía Uno algo parecido en el mundo de la electrónica. Por ejemplo, imaginemos: ¿Y si la música ‘comercial’ fuese la experimental y, por contra, el sonido comercial fuese solo para un reducto de expertos o mal llamados freaks de la materia? ¿Por qué un track cómo Alt. 102 no debería ser algo celebrado por cien mil personas en un estadio (ahora que al fin podemos, más o menos, volver a proyectar eventos multitudinarios tras la pandemy), con gente llorando emocionada, perdiendo la cabeza y sacándose selfies horribles en cada segundo del track? ¿Qué define o ha definido, en general, este mundo compartimentado entre sonidos fáciles y sencillos y sonidos con los que solo unos pocos se atreven y disfrutan? Sí, ha sido así, y hay elementos obvios que lo demuestran… Pero, ¿acaso no es el arte, precisamente, el reto de imaginar las cosas de otro modo? ¿Acaso no merece la pena, tan siquiera, dejarse llevar por ideas semejantes durante un rato, cerrar los ojos, y cambiar a U2 por KOTEC y Vlaeminck en el Camp Nou? (o Spotify Camp Nou, ya no sé cómo ha quedado el asunto).
Sea como fuere, celebrando Ucronía Uno en Rhod Records este 28 de abril y preguntándome cuántas más saldrán de su estudio. Ojalá sean muchas, necesitamos ucronías electrónicas.