Svarog y su misticismo electrónico en Dynamic Reflection [Première!]

Este viernes 30 de julio llega el nuevo EP de Svarog, Mysticism, editado por el sello Dynamic Reflection. Compartimos en exclusiva el track Morning Meditation, un sofisticado track techno para los que gustan del beat, también para sus meditaciones matutinas.

La estatua de la cabeza del Buddha que ha sido respetuosamente incorporada por un árbol se encuentra en Angkor Vat, complejo de templos ubicado en Cambodia y, a día de hoy, una de las mayores atracciones turísticas del país. Una imagen icónica que es la cubierta del próximo EP de Svarog, Mysticism.

Cuando estuve en Cambodia para visitar los templos tendría alrededor de los 13 o 14 años, es decir, hace ahora más de veinte años, y nada indicaba que, precisamente, dos décadas después, recibiría en Vanity Dust un EP con esa singular imagen en la portada.

Siempre he tenido cierta inclinación por el budismo, más todavía en su vertiente zen, con nombres como Taisen Deshimaru orbitando en algunos de los libros que corren por casa. Y, en cuanto al misticismo, sin duda el Taoísmo es una de mis mayores predilecciones y modos de pensar y plantear las movidas que nos ocurren en la vida.

Sin embargo, cierto es que aquí no hemos venido a hablar de mis inclinaciones o simpatías espirituales, sino que estas solo nos sirve como leve entrada para el nuevo trabajo de Svarog en Dynamic Reflection.

Lo que me lleva a celebrar el nuevo release de Svarog son tres serias razones: por un lado, la curaduría del sello de Paul Boex (mitad de Abstract Division), que fundó en 2008, por el que han pasado la mayoría de artistas que escucho a día de hoy: desde Exium a Deepbass, Luigi Tozzi, Eduardo de la Calle, Yan Cook, Advanced Human o Stefan Vincent. La lista es larga, sus releases épicos, y la influencia del sello en la pista y en la mente de muchos es algo realmente épico.

En segundo lugar, Svarog, artista ucraniano a quien tengo en órbita desde hace tiempo, por articular un techno que aspira al ritmo moderado (en comparación con el desaforado sonido rave), a las emociones sutiles y a un estado de la mente lúcido, abierto, con ciertos toques etéreos, cósmicos y hasta contemplativos, llamando por eso a la acción de movimiento.

En tercer lugar, y este punto tiene especial importancia, porque con este release introduce el misticismo en el techno, sin apelar al espacio exterior o a lo cósmico, que es un recurso más habitual. De hecho, posiblemente, el track que estrenamos hoy, Morning Meditation, sea el único track techno que aspira también servir como artefacto meditativo, sin que tenga que ser, como es lo habitual, la siempre trillada música New Age o Chill Out. En este sentido, parece que todo tiene que ser light o shiny o melódico y cursi cuando entramos en el mundo de la meditación. Cuando, en realidad, la meditación es un estado de atención particular que puede llevarnos a escuchar el latido del corazón, a centrarnos en la respiración y su ciclo, a notar cómo la vibración de todo ello nos permite entrar en un estado de mayor sosiego y lucidez.

El techno, de hecho, puede ser esa puerta de acceso: ¿por qué no? ¿Necesitamos acaso flautas, gongs y melodías horteras para lograrlo? ¡Nein! Svarog lo demuestra con creces en este release: el techno puede acercarse, también, a esa leve sonrisa del Buddha que, con el devenir de los años, ha ido dejándose envolver por las ramas y los troncos de los árboles, hasta formar entre su cabeza y el árbol una unidad.

En tiempos en los que la ciencia lucha para seguir ofreciendo respuestas ante aquello que reta nuestra existencia, en un momento en el que muchos ni tan siquiera la escuchan porque encuentran más llamativa la inagotable fuente de la conspiración, la puerta legendaria del misticismo, siendo prudentes (es decir, sin ser tampoco crédulos), sigue dándonos pie a vivir sin todas las respuestas, a cuestionarnos otras formas de vivir, poseer, creer y estar en el mundo. No está nada mal, y con Svarog suena todavía mucho mejor.

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