Alcanzamos la edición 45 de You Play I Write invitando a Ribes, productor mexicano afincado en Barcelona que lleva décadas en el mundo de la música y explorando, también, los sonidos electrónicos. Artista exigente y discreto, comparte podcast exclusivo que, por ahora, es el único que podrás encontrar de él junto a, eso sí, sonados releases en sellos como Chapter Records, donde firmó su último solo EP, Smash Together.

En las preguntas que intercambiamos para acompañar el podcast, hablamos de su trayectoria, sus intereses musicales, referencias y, cómo no, de Chapter Records y su forma de trabajar en el estudio.

Más allá de la exposición (o sobreexposición) en las redes sociales, que algunos consideramos ya cosa del pasado —aunque falten todavía algunos años para que más gente se sume a esta manera de pensar—, hay djs y productores de enorme talento que trabajan a destajo con su sonido y que no están pendientes del like, sino del beat.

Uno de ellos vive y trabaja en Barcelona, y se conoce por el nombre de Ribes. Poco importa su aspecto físico (no comparte fotos) y mucho, en cambio, su sonido, que se ha podido ver en distintos sellos y, en especial, en Chapter Records, con el EP Smash Together que salió hace ahora un par de meses y que aprovecho para recomendarte si no lo has comprado ya. 

A raíz de ese release, y con ganas de compartir uno de los primeros (sino el primer) podcast exclusivo de Ribes, urdimos este You Play I Write que llega a su edición número 45.

Pero no te confundas: que Ribes no haya compartido antes incontables sets o que no tenga producciones electrónicas de hace una década no significa que sea un recién llegado al mundo del techno o un aprendiz con aspiraciones. Eso significa, sobretodo, que Ribes es exigente y que ha atravesado múltiples facetas creativas, más allá también de la producción (como verás), en su dilatada experiencia en el mundo de la música.

El podcast de Ribes, bailable y plenamente actual, se define por el buen gusto en la selección y una mezcla impecable que desborda el criterio intuitivo de muchos. Como verás, hablamos de profesión y método, algo de lo que Ribes tiene mucho que contar. 

Ribes: al encuentro de la expresión electrónica

Durante varios años, Ribes estudió música contemporánea (Rock, Blues y Jazz): desde su composición hasta su producción. Tras estudiar, también, ingeniería de audio y especializarse en masterización, nació su interés en programar con secuenciadores y se amplificó su interés por la síntesis de sonido. Tras mucha prueba y error y gracias a sus estudios musicales, Ribes ha ido encontrando y mejorando su forma de expresarse musicalmente. Un proceso nada sencillo que quizás tú también conoces bien. En su caso, este proceso de maduración ha sido largo y complejo, con un feliz resultado que se nota en sus producciones actuales. Como afirma el artista, literalmente, “hacer música ahora es mucho más divertido y gratificante”. Ribes tuvo su primer sintetizador (un Jupiter 4) en el año 1996 y alucinó con lo que ya en ese momento ese cacharro era capaz de hacer. En 2007 estudió ingeniería de audio, precisamente con la idea de poder sonar tal y como él quería. En palabras de Ribes, “lo hermoso de la música es que es un universo infinito”. Lo fascinante de Ribes es que se haya tomado tantos años y haya realizado un exigente esfuerzo sostenido en el tiempo para poder indagar no solo en esta galaxia, sino en muchas otras, en un viaje de ida que, me da la sensación, es tan complejo y exciting que está todavía comenzando. 

Ribes y el beat del presente

Cómo gran melómano que es, no puedo evitar preguntarle a Ribes por su opinión acerca de la música electrónica que se está haciendo ahora. Su respuesta es en clave positiva, afirmando que hay bastante música buena a día de hoy. Su interés va más allá del interés por expresión musical de muchos artistas, posiblemente gracias a su conocimiento y estudios. Ribes se fija también en la composición y los arreglos que estrujan y dilatan los límites establecidos (en la síntesis e ingeniería de audio) del sonido, y menciona a algunos artistas, como por ejemplo Abdulla Rashim, Evigt Mörker, Peter Van Hoesen y Reeko.

A nivel de favoritos, pregunta siempre necesaria pero que pone al artista en una tesitura, Ribes afirma que la lista es larga, y suelta algunas menciones: Planetary Assault System y Oscar Mulero. También le fascinan PWCCA y disfruta con las producciones de Eyvind Blix. Como Dj, no lo duda, y menciona a Wata Igarashi como “de otro mundo”. 

Al preguntarle por aquello que no le resulta tan estimulante, o digamos al intentar sonsacarle algún tipo de crítica a la actualidad, Ribes menciona el abuso de ciertos sonidos que se han convertido en un recurso fácil que, si bien podían ser interesantes, de golpe te los encuentras varias veces en un mismo EP o incluso en un VA.

Ribes, Barcelona, el clubbing y la música durante la pandemia

Ribes pasó su etapa de clubber y raver en México, por allá el año 1996. Visitaba con frecuencia en Ciudad de México los clubes Pervert y 69, y luego tendió a moverse más en el entorno raver. En Barcelona sale cuando puede (o se podía) y solo si algo le interesa en especial. En cuanto a la opinión del clubbing en la ciudad, considera que la escena de BCN es muy solvente. Nadie sabe lo que quedará de ella cuando la pandemia pase, pero, hasta que llegó el confinamiento de marzo y por lo tanto se podía tener una opinión de lo que era, Ribes no tenía ninguna queja acerca de su riqueza y pluralidad. 

Mientras duró el confinamiento, a principios de año, la música fue para Ribes una válvula de escape. No solo para él, sino que también lo fue para su hija. A petición de ella, juntos repasaron todos sus discos y escuchaban especialmente Metal, que servía como banda sonora para las sesiones de juegos de mesa y dibujo con las que intentaban hacer pasar las interminables horas encerrados en casa. 

Ribes en el estudio y su experiencia con Chapter Records

Cuando Ribes se pone en modo producción, siempre tiene una idea previa de lo que quiere trabajar, aunque sean apenas algunas directrices vagas. Por ejemplo, los bpm a los que trabajará, un determinado ritmo o compás, o quizás un sonido específico, como podría ser una línea con Pulse Width Modulation. A partir de ahí, en función de cómo se siente y de lo que le rodea ese día, se deja llevar, manos a la obra. 

Ribes suele trabajar los temas en su casa, y luego realiza la mezcla en el estudio. Actualmente tiene poco tiempo para producir, y por eso a veces se dedica a ello una noche entera sin parar pero, en otras, avanza en franjas de dos horas. 

En relación a su release para Chapter Records, Smash Together, la proximidad y la afinidad con Anika Kunst fueron determinantes en su publicación. Aunque no se conocían personalmente hasta que coincidieron en el mismo espacio de estudios en Barcelona, la fundadora de Chapter Records y él tenían algunos amigos en común. Las charlas comenzaron cuando ambos coincidían en los estudios. Entre una cosa y otra, Ribes le mostró sus trabajos y le comentó que buscaba un sello adecuado para editarlos, a lo que Anika Kunst, tras escucharlos, le ofreció editarlos. Ribes, of course agradecido, se tomó algo de tiempo para poder ajustar algunos detalles y para masterizar los temas. Dentro de los tracks del EP, comenta Ribes, uno le despertaba ciertas dudas, pero Anika Kunst estaba convencida de que también tenía que estar en el release. Al final, efectivamente, el track fue uno de los que mejor feedback obtuvo.