Desde México y con groove internacional, un set house, ecléctico y gamberro del dúo Tom & Collins, que suman años de trayectoria en la escena más competitiva, sorteando el circuito comercial con sus vibes e influencias diversas.

Escucha ahora el mix de Tom & Collins en exclusiva al final de este post.

Este verano la excepción electrónica en Vanity Dust la marcan Tom & Collins con un set que quizás no estés acostumbrado a escuchar si eres de los que habita en las grutas techno, pero que quizás te resultará más apetecible si piensas en algo de luz, un poco de flow canalla y te quitas el sombrero lleno de prejuicios y lo lanzas a la pista para que otros clubbers devotos lo pisen o se lo pongan pegando brincos. Tom & Collins son relevantes por diversos motivos, y quizás el más interesante es que, desde México, han logrado convertirse en una de las caras visibles de la escena house comercial a escala internacional, y eso es saber jugar bien, muy bien. Porque el género suele andar dominado por artistas de países que ya conocemos, y uno celebra que se incorporen al circuito, por muy competitivo y burneado que esté, otras localizaciones que representen distintas influencias y sonidos. Nos vemos en un contexto global, y el sonido de Tom & Collins, que este set en exclusiva plantea de forma extensiva, se nutre sin duda del beat y referencias internacionales, y maneja diversos moods y momentos, con tracks pop, naïf y sensibles (minuto 27) que el groove arrastra hasta su contención. No sabemos si es un guiño o un viraje en forma de remix, lo que sí sabemos con Tom & Collins es que degüellan el aburrimiento cuando el set parece que va a estancarse. Quizás os resulte extraño imaginar a Vanity escuchando este set, o apoyando a Tom & Collins desde este búnker del beat. La cuestión es el flow y la conexión, y que los mundos de la electrónica están obligados a convivir, así que esta es una misión de paz con un género y un estilo particulares a los que no les he prestado, en general, demasiada atención. No por ello deja de mover a millones de personas, que harán a su vez bien en abrirse a otros sonidos que por aquí puedan encontrar. Como reza uno de los tracks del set, Body to body, y como había entendido yo: party to party. Y quizás mi lapsus no era tan fatal, porque el cuerpo bailando es lo que hace la fiesta, y si en una de las parties pinchan Tom & Collins en su versión más festiva y desenfadada, bienvenido sea. Porque, si pensamos en un libro como Miedo y Asco en Las Vegas, y le ponemos una banda sonora techno, lo convertimos en un libro de terror. En cambio, si lo arrollamos con este set, disfrutaremos el viaje sin necesidad de alucinógenos. Que el techno es demasiado serio lo sabemos, y nos gusta, como también les gusta a Tom & Collins buscar el groove más llevadero y las vocales más sensuales de su playlist a la caza del clímax general.

Además, como productores, Tom & Collins se han marcado recientemente un EP [en Mother Recordings] (puedes escucharlo aquí pero encontrarás también en el set uno de sus tracks, así que keep calm) la mar de fresco, pegadizo y bailable, de esos en los que dices, sí, por qué no, voy a hacer la conga con desconocidos, pero que nadie grabe, por favor.

Como ya afirmaban Tom & Collins (cuyo nombres reales son Jorge Corral y Juan Pablo Escudero, en caso de que quieras saludarles en una de sus actuaciones) en una entrevista de 2016 para Rolling Stone México, los latinos llevan el ritmo en la sangre, y eso tampoco se lo vamos a discutir. Así que, dicho todo esto —y sin haber mencionado sus hitos principales, que pasan por haber pinchado en Tomorrowland y otros grandes festivales, o en haber dado una charla en el ADE Amsterdam, o en haber pinchado en fiestas oficiales de eventos como los Grammies Latinos, podría seguir pero ya veis la liga), solo queda agradecer su buena disposición a compartir sus vibes con este set que, créeme, puede ser el hype de tu próximo afterparty.