Guillam @ Paral·lel Festival 2019 — Recuerdos de una soleada mañana en las montañas
El set de exquisito y sublime ambient de Guillam, grabado el sábado por la mañana en el festival de Guardiola de Berguedà el pasado año, sale a la luz en tiempos de oscuridad, para recordarnos que el espíritu Paral·lel Festival sigue alumbrándonos por muy mal que suene el presente. Dándole al play todo vuelve a activarse, como por arte de magia, igual que si estuviésemos cerrando el verano de 2019, tan felices y despreocupados. ¿Te unes al viaje al pasado?
¿Cómo es una mañana en Paral·lel Festival? Recuerda conmigo y disfruta de este exclusivo set que aportará calma a tu oficina (desierta) o paz a tus (insufribles) horas de teletrabajo en casa.
Al ser preguntado, Guillam piensa en el lugar como punto esencial para plantear su trabajo creativo.
¿Y cómo fue aquella mañana de sábado de septiembre de 2019? Algunos seguían adormilados en las tiendas, otros apenas habían pegado ojo, aunque no eran pocos los que estaban haciendo cola para su café y trozo de fruta o croissant, o charlando en las tiendas. También había bastante aglomeración en las duchas.... El campo, la pista, lucía vacía y serena, y algunos buscaban la sombra debajo de los árboles de alrededor, en las hamacas improvisadas, o sentados en las sillas debajo de los parasoles con marcas de bebidas energéticas o cerveceras.
Una mañana en la que el cansancio del día anterior, mejor dicho, de la noche anterior, ya se dejaba entrever, aunque las gafas de sol ayudaban a menguar el espanto, que en muchos casos no era para tanto.
En definitiva, las mañanas en Paral·lel Festival son pacíficas y sosegadas, casi perezosas, todo el mundo está ensimismado con el lugar, con ganas de conversar y de escuchar algo fresco, luminoso y pausado, de ahí que entrase en escena tan gustosamente el recital de Guillam.
Guillam conoce el festival desde los inicios, puesto que es una de las mentes que se ocupa de trabajar con la programación para traer lo que luego se convertirán en los sets más comentados, criticados, apoyados y recordados, año tras año. Como él mismo afirma: «Refracted y yo trabajamos en la estructura de una manera trasversal y equilibrada, los dos aportamos en todos los detalles de la programación. Tenemos un background muy similar que facilita mucho el diseño del line up». Este inmersivo conocimiento que tiene Guillam de los sonidos y artistas que dan vida a Paral·lel le sitúan como mente privilegiada a la hora de desplegar sonidos que, en su caso, rozan el beat y habitan en su periferia: en todo aquello que te puede hacer sentir y despertar la sensibilidad, en todo lo bueno que albergas en tu interior, aunque eso implique, también, purgar inquietudes, extraer emociones ocultas o pensamientos que preferirías no haber tenido, porque todo viaje introspectivo exigente tiene su lado oscuro, también.
Si el techno y la programación nocturna se ocupan de hacerte sudar y de mandarte en un viaje espacial para que te olvides de que estás en este planeta, conectado con las estrellas y las escasas luces que hay en el escenario a modo de nave espacial, la programación diurna es justo lo contrario: un bello pasaje para que supures naturaleza y conexión con el entorno, las sonrisas y las coñas con los amigos, el tumbarte en el césped y mirar al cielo y decir: Sí, Paral·lel, sí quiero. Y casarte en el festival (como ya ha ocurrido, en realidad) o con el mismo festival. Somos muchos los que no tenemos pareja y que no negaríamos casarnos con el festival entero —así, como idea—.
Paral·lel Festival 2020 en Guardiola de Berguedà: lugar y fechas confirmadas.